REFLEXIÓN SOBRE MI PRÁCTICA EDUCATIVA Es verdad que todos hacemos lo que podemos en nuestras clases, o mejor que lo que podemos, a veces es lo mejor que nos dejan. Siempre hay aspectos que nos gustaría mejorar en nuestra práctica educativa, pero que por una razón u otra no siempre somos capaces de hacerlo. En lo que a mí respecta, a mí me gustaría que mis clases fueran siempre interactivas (y en realidad es lo que hago o intento en la mayor parte de los casos), pero en una clase con 25 alumnos y diferentes niveles de inglés cada uno de ellos, siento que necesitaría hacer mi práctica más inclusiva pero no consigo el cien por cien. Uno de los mayores obstáculos que encuentro muchas veces es la burocracia que nos quita tiempo de preparación de lo realmente importante: la clase con los alumnos. Estamos dejando esto en un segundo plano cuando en realidad debería ser lo primero. El profesor debería gastar todo su tiempo y esfuerzo en su clase, en su aula y en sus alumnos y eso es lo que podrás ver ahora en esta presentación.